Opinión / Entomafobia

Peñalandia

¡Bienvenidos a Peñalandia mis queridos entomafobicos! Donde los diputados afines al inquilino de Los Pinos (PRI-Verde-PANAL) aplauden los logros durante la administración peñista sin importar si los hay o no, pero eso sí, todos se alinean para respaldar al ciudadano Pepe Toño. Donde los senadores cierran el periodo legislativo sin designar procurador general de la república, ni fiscal anticorrupción, pero sí mandaron a la congeladora la reforma sobre la eliminación del fuero y se fueron los de la bancada del PRI a festejar el cierre de la legislatura a comer tostadas de venado con el presidente Peñita por cortesía de Emilio Gamboa Patrón.

Aunque no invitaron a Enrique Ochoa Reza a la comilona, el “Clavillazo”, quien jugaba como dirigente nacional del tricolor… y es que no sabemos si renunció o lo renunciaron. Entra de emergente el ex gobernador de Guerrero, Rene Juárez Cisneros (que dicen que es muy cuatacho del ciudadano Pepe Toño).

Y es que la campaña de Pepe Toño no levanta del tercer lugar en las encuestas y trascendió que ha habido presiones del empresariado para que decline por el Chicken Little ©Anaya…. Y los independientes dicen que también a ellos los invitan a declinar los señores que mueven el dinero del país ¿será?

No es novedad para nadie que los empresarios no ven con buenos ojos al Gallito Feliz de Macuspana por sus declaraciones en contra de algunos de los miembros del sector productivo, declaraciones que siguieron con el mismo tono en el foro de Tercer Grado, ahora los cocotazos están de a tostón … y luego con las declaraciones de Paco Ignacio Taibo II de expropiaciones… como para decirle: ¡no lo ayudes compadre!

De pena ajena con la fiscalía de Jalisco en el caso de los cineastas desaparecidos en Tonalá, pues después de anunciar el asesinato y la disolución en acido de los cuerpos de los tres jóvenes, ahora se desdicen aunque no saben qué pasó con los jóvenes.

La nota de la semana sin duda no vino de un político, sino de un periodista, el bilioso Ricardo Alemán estuvo en el candelero a finales de la semana pasada pues tuvo la ocurrencia de hacer retweet de una imagen donde palabras más, palabra menos, decía que al camarada AMLOvich habría que darle cuello.

Como podría esperarse las reacciones en redes y medios no se hicieron esperar, y le llovió a tal grado que Ricardo “el rabioso” Alemán tuvo que salir a dar la cara para explicar que la imagen que compartió no dice lo que quería decir y de lo que dijo, pues, ya nadie le creyó.

Sorpresivamente, el domingo por la tarde, a través de un comunicado de prensa Televisa dio a conocer que daba por terminada la relación laboral con el periodista y recalca la necesidad de no ser promotores de la violencia. Sí, aplaudo la decisión de televisa, este personaje siempre ha sido un periodista tendencioso y promotor de iras. Sí, creo que la violencia, insinuada, verbal, por lo bajito, no debería tener cabida en ninguna circunstancia, tolerancia cero a las provocaciones.

Nada es justificante de agresión, incluso ser el blanco de los golpes bajos. Creo que como electores ya nos toca elevar la discusión, dejar ese clasismo que se refleja en las redes y en el discurso contra los partidarios de una opción. Decirle a alguien “Chairo”o “pejezombi” es clasismo, pero recuerden que referirse a alguien como “derechairo”, "facho" o "fifi" lo es también.

Descartar a priori una crítica o desacuerdo a un proyecto es intolerancia, sea de izquierda (si lo hubiese) o de derecha o del engendro ideológico que usted prefiera o no. Creo que debemos responsabilizarnos de nuestros dichos, dejar de lado el "o ellos o nosotros" que divide a la sociedad, aunque hagan maromas mentales para justificarse.

Perdónenme mis amables tres lectores, pero eso lo veo por de tricolores, de amarillo-azules y de morenos por igual. O maduramos como electorado a seguiremos hablando de darle cuello a unos o mandar al paredón a otros.

COLOFÓN: ¿A qué santo se encomienda Geño Hernández, ex gobernador de Tamaulipas, que ya libró la extradición?

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