Opinión / Así las cosas

Sábados de verano del 2023

Soundtrack para esta columna “Crash and Burn” de Savage Garden

“When you feel all alone

And a loyal friend is hard to find

You're caught in a one way street

With the monsters in your head”

M se ha ido y de pronto, me encuentro con muchísimo tiempo entre mis manos. Mi mente me juega malas pasadas, me siento “abandonada” y no sé qué hacer conmigo misma. Los sábados se me hacen eternos, me despierto temprano para ir al gimnasio (después de dormir muy mal el viernes por la noche) y matar un poco de esta ansiedad mientras me agoto hasta no poder más, esto sólo se puede logar un par de horas y después de eso, el día se antoja eterno.

Me comienzo a cuestionar todo: mis decisiones del pasado, las personas que se borraron de mi vida en cuánto les puse un límite sin decir adiós ¿De verdad soy una persona tan difícil de querer?

Me gusta la soledad, pero es muy diferente estar sola porque así lo quiero a estar sola porque no hay otra opción. Bebo más de lo que debería, quisiera dormir y dormir, pero mi ansiedad no me deja, vivo pendiente de los mensajes de whatsapp, pienso que eso no es sano, que debería de meterme a mil y una clases o actividades para mantenerme ocupada.

Mis amigas no están al alcance, cada una tiene su vida y sus prioridades.

¿Dónde está la amiga incondicional de los libros y las películas? En mi vida, es un mito. Pienso que nadie tiene la obligación de sostenerme, que me las tengo que arreglar sola, pero es tan difícil. “He llorado pa’la vida” diría mi amiga Isela, que me hace más falta que nunca.

Mi situación actual sumada a la escasa salud mental que tengo asociada a la perimenopausia no es buena. Hay días en que me pregunto ¿Cuánto tiempo más puedo aguantar así? La respuesta no es alentadora. Respiro, entro en pánico, me siento desolada. El bucle es infinito y se repite.

“Esto también pasará” me repito una y otra vez como en una oración. Quiero creérmelo, pero en realidad no me lo creo.

Hay que sonreír y poner buena cara y hacer como que no pasa nada.

Y así las cosas…

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