ELEFANTE BLANCO. Los productores del campo mexicanos se reorganizaron para empujar con protestas y carreteras cerradas su pliego petitorio en voz alta y en el exigen un precio por tonelada, apoyos directos y control a importaciones.
En el maíz blanco, los campesinos pidieron un presio base de 7,200 pesos por tonelada; para el sorgo el precio solicitado es de 6,000; a la par, reclaman un subsidio al diésel y fertilizante, así como una banca de desarrollo y reglas claras de comercialización.
El movimiento en el norte del estado se sumó a la jornada nacional y colocó a Tamaulipas en la mesa de definiciones federales, por ello los campesinos buscan mantener la presión hasta obtener un precio de referencia y un calendario verificable de pagos.
Las organizaciones campesinas que protestaron en varios estados, insistieron en que el costo de producir subió y que el mercado no cubre hoy sus números, factores por los que demandan un piso de precio, apoyos y certidumbre antes del siguiente ciclo.
La respuesta del gobierno federal se realizó desde la Ciudad de México y dejó un corte parcial pues, tras más de cuatro horas de reunión, la Segob y la Sader anunciaron un precio de 6,050 pesos por tonelada de maíz blanco exclusivamente para productores de los estados de Guanajuato, Jalisco y Michoacán.
El titular de la secretaría de Agricultura del gobierno de México, Julio Berdegué, dijo que van “a abrir las ventanillas a la mayor brevedad para los productores de maíz blanco de las tres entidades que quieran registrarse, y los gobiernos de Jalisco, Guanajuato y Michoacán también publicarán su mecánica operativa de apoyo complementario, para completar el precio indicado”.
Con ese anuncio, Tamaulipas quedó fuera del ajuste y no hubo precisión sobre extensión del esquema al noreste ni sobre el sorgo, por lo que los productores preven mantener sus protestas, mismas que el lunes pasado incluyeron cierres intermitentes de las carreteras.
Productores de diversas entidades del país rechazaron el monto y pidieron un precio mayor frente a costos al alza, en el caso de Tamaulipas, la expectativa es que cualquier definición incluya al estado y contemple al sorgo con un piso que permita cerrar el ciclo, pero hasta ahora, la decisión federal aplica solo al Bajío y el gobierno de Tamaulipas no se ha pronunciado.