GUILLERMO ORTEGA. La presidenta Claudia Sheinbaum, reaccionó con firmeza ante los intentos de desestabilizar su gobierno a través de la reciente marcha organizada por la Generación Z el pasado 15 de noviembre, en la Ciudad de México.
Sheinbaum subrayó este lunes 17 de noviembre que los gritos y las provocaciones de los manifestantes no lograrán debilitar su compromiso con el pueblo.
"¿Creen que van a debilitar a la presidenta por lo que gritan? No, ¡más fuerte soy, más fuerte!", exclamó Sheinbaum en su conferencia de este lunes 17 de noviembre.
Dejó claro que los intentos de confrontación solo fortalecerán su determinación. En su intervención, la mandataria reiteró que está dedicada a trabajar con el respaldo de los ciudadanos y que no se dejará afectar por los insultos y actos violentos de los grupos de choque.
La mandataria también condenó la violencia registrada durante la marcha, donde un grupo de manifestantes atacó a los elementos de la policía. En respuesta a estos actos, Sheinbaum informó que solicitó a la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México investigar a los grupos violentos que participaron en la movilización, destacando que estos incidentes deben ser esclarecidos para evitar que se repitan.
“Pedí a la fiscal de la Ciudad de México, Bertha Alcalde, que se investigue a estos grupos. ¿Por qué esta violencia? ¿Están pagados?”, cuestionó la presidenta, aludiendo a la posibilidad de que los actores detrás de los enfrentamientos estuvieran financiados para crear confrontaciones.
Además, Sheinbaum aclaró que su gobierno no caerá en provocaciones.
“No vamos a caer en la provocación, lo que buscan es generar imágenes de represión”, afirmó, añadiendo que, a pesar de la complejidad de la situación, el gobierno no recurrirá a la represión para manejar las protestas.
La mandataria también denunció los incidentes violentos durante la protesta, como el caso de un individuo que amenazó de muerte a los oficiales de la policía mientras intentaba derribar las vallas de seguridad en Palacio Nacional.
Según Sheinbaum, el agresor gritaba "van a morir" mientras decía estar armado. Ante este tipo de amenazas, la presidenta exigió que se abriera una carpeta de investigación para esclarecer los hechos.
La marcha del pasado 15 de noviembre, según Sheinbaum, no tenía como objetivo la protesta pacífica, sino la generación de confrontación con las autoridades. Aseguró que los manifestantes llegaban preparados con herramientas como esmeriles y ganzúas para derribar las vallas de contención colocadas para evitar confrontaciones directas.
Sheinbaum también abordó la asistencia de los manifestantes, señalando que la marcha no estuvo compuesta principalmente por jóvenes de la Generación Z, sino que incluyó a adultos, muchos de los cuales pertenecían a la Marea Rosa, un grupo vinculado con la oposición política de derecha.
La presidenta sugirió que detrás de la marcha había grupos de choque que buscaban desestabilizar al gobierno federal.
“El objetivo de estos grupos era ir contra la policía y generar caos, no una manifestación legítima”, aseguró Sheinbaum. En ese contexto, también destacó que la falta de afluencia al Zócalo, en comparación con otras protestas, demostraba que la marcha no tuvo un respaldo popular masivo.
Finalmente, la presidenta reiteró su llamado a la no violencia y pidió a todos los sectores de la sociedad actuar con responsabilidad y respeto. Sheinbaum expresó que su gobierno continuará trabajando en beneficio de la mayoría y que no se dejará intimidar por los intentos de socavar su liderazgo.
“Nosotros no reprimimos, no vamos a caer en la provocación. Estamos aquí para seguir trabajando por el pueblo, no nos vamos a rajar”, concluyó la mandataria, reafirmando su postura frente a los recientes actos de violencia y los desafíos políticos que enfrenta su administración.